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El cristianismo son las enseñanzas de Cristo sobre el amor, compasión, misericordia y paz. Prohíbe la crueldad a los animales. Muchos pasajes y citas en la Biblia nos aconsejan adoptar un estilo de vida a base de plantas y cuidar de nuestros amados amigos animales. Los siguientes son algunos de los extractos de las enseñanzas cristianas: Entonces Dios dijo: “Les doy cada planta con semilla en la faz de toda la tierra y cada árbol que tiene fruto con semilla en él. Ellos serán suyos para alimento”. - Génesis “Solo tienes que pedirle al ganado, para que ellos te enseñen y las aves del cielo, para que ellas te informen. Las insidiosas cosas de la tierra, te darán lecciones y el pez del mar te proveerá una explicación: no hay una criatura como tal pero sabrás que la mano de Dios ha arreglado cosas como ésta! ¡En su mano está el alma de cada cosa viviente y el aliento de cada ser humano!” – Job El mismo Señor Jesucristo es vegetariano y Él prohíbe comer carne y ofrecer animales como sacrificio. En una entrevista con la periodista Andrea Bonnie que fue publicada en el periódico Irish Independent en diciembre del 2008, la Maestra Suprema Ching Hai abordó las enseñanzas del Señor Jesús acerca de una dieta compasiva y variantes de traducción bíblica que podrían haber llevado a malas interpretaciones. Él es un vegetariano puro. Él vino de la tradición esenia y los esenios son vegetarianos todo el tiempo. En mi charla siempre hemos mencionado que Jesús nunca comió carne; claramente en la Biblia, se declara en muchos sitios que los humanos no deberían comer carne en lo absoluto. “No estéis entre comedores de carne y bebedores de vino”. “Carne para el vientre, vientre para la carne y Dios destruirá ambos la carne y a ellos”. “¿Quién les dijo que mataran a todos los bueyes y a las ovejas para hacerme ofrenda? Por favor detengan la matanza de todos estos inocentes. Laven sus manos porque ellas están llenas de sangre. Si continúan haciendo eso, voltearé mi cabeza cuando oren”. Así, por ejemplo. De acuerdo al libro “Evidencia que Jesús y los Auténticos Cristianos Arameos Eran Vegetarianos” escrito por James Bean de la Radio Despertar Espiritual, los primeros seguidores de Jesús se adhirieron estrictamente a la dieta vegetariana. La colección restante más grande de las escrituras ebionitas es Homilias Clementinas y Reconocimientos de Clemente, que son evangelios vegetarianos que condenan el sacrificio animal en cualquier forma. “Todas las cosas que son bien placenteras a Dios son éstas: orar a Él, pedirle a Él, reconocer que Él es el dador de todas las cosas y ofrece con meticulosa ley; abstenerse de la mesa de los demonios, no probar carne muerta, no tocar sangre; lavarse de toda contaminación y el resto, en una palabra, — como los judíos temerosos de Dios han escuchado, también escucha y sé una mente en muchos cuerpos; permite que cada hombre esté dispuesto a hacer a su vecino esas buenas cosas que él desea para sí mismo”. (Homilias Clementinas) Además, otras defensas por el vegetarianismo/veganismo están representadas aquí con citas de San Clemente de Alejandría, San Francisco de Asís y otros grandes personajes en la tradición cristiana. “Todas las criaturas tienen el mismo origen que tenemos nosotros. Como nosotros, ellos derivan la vida del pensamiento, amor y voluntad del Creador. No herir a nuestros hermanos es nuestro primer deber hacia ellos; pero detenerse allí es un completo malentendido de las intenciones de la Providencia. Tenemos una misión más elevada. Dios desea que nosotros los socorramos cuando sea que ellos lo requieran”. - San Francisco de Asís “Todas las cosas de la creación son hijos del Padre y por ende hermanos del hombre, Dios quiere que ayudemos a los animales, si ellos necesitan ayuda. Cada criatura en sufrimiento tiene el mismo derecho de ser protegido”. - San Francisco de Asís “Oh, Dios, amplia dentro de nosotros el sentido de la hermandad con todas las cosas vivientes; con nuestros hermanos los animales a quienes Tú ofreciste la tierra como su hogar en común con nosotros”. - San Basilio el Grande “El vapor de las comidas con carne oscurece el espíritu. Uno apenas puede tener virtud si uno disfruta de fiestas y alimentos con carne. En el paraíso terrenal, nadie sacrificó animales y nadie comió carne”. - San Basilio el Grande
